Si
las mariposas al volar
lograran
tu paso imitar
se
moverían amor mío
con
la gracia que tiene tu andar…
Pelusita
perfumada…
te
deslizas por el viento…
mis
ojos no te ven,
pero
me llega tu aliento.
Más
brillante que un diamante
Tu
eres de la aurora el arco iris
deslumbrante
de colores y belleza
inalcanzable…
intocable…
Pero
estás ahí, eres real
has
llegado alegrando la mañana
como
perlas de rocío y el cantos de los ruiseñores
desnudando
hermosos paisajes
Puedo
descubrir en los copos de algodón
libres,
andantes por el cielo
las
sinuosas formas de tu cuerpo
y el
color miel de tu boca y de tu piel.
Miel
que disfruto noche a noche
desde
aquella, la primera, en que nos amamos
y
aunque amanezcamos trasnochados,
nos
miramos con más amor, del que nos damos.
Delalma
Viernes,
19 de febrero de 2010
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